El Colegio de Profesionales de la Química Clínica de Nuevo León, A. C., nace en el año de 1974 como una respuesta visionaria para convocar a los profesionistas de la Química Clínica y conocer sus necesidades en el desarrollo de su profesión y colaborar, en la medida de la posible, en la solución de ellas.

Estas necesidades, como el reconocimiento profesional a nivel de gremio, que siempre estuvo en primer término en la mente de sus fundadores, comprendían otras de índole científica, académica y social. Actualmente, nuestro Colegio es miembro de la Federación Nacional de Colegios de la Química Clínica, A.C. y de la Federación de Profesionistas de Nuevo León, A.C.

Desde sus inicios, el Colegio tuvo muy claro su papel de fomentar la actualización académica de los profesionistas de la Química Clínica, a través de la difusión de los avances científicos y tecnológicos que se realizan en esta área. Esta difusión se empezó a llevar a cabo mediante sesiones mensuales y la organización de congresos nacionales, encuentros regionales (que posteriormente, se convirtieron en congresos estatales) y cursos teórico-prácticos tanto estatales como nacionales.

A la par de fomentar la actualización académica de sus asociados, se procuró la unión de los profesionistas dedicados al área de la Química Clínica. Actualmente, en su mayoría, sus colegiados son profesionistas egresados de las Facultades de Ciencias Biológicas, Ciencias Químicas y de Medicina de la Universidad Autónoma de Nuevo León y así tenemos socios con el título de Químico Bacteriólogo Parasitólogo, Químico Farmacobiólogo y Químico Clínico Biólogo, respectivamente. También nos complace haber recibido en nuestro Colegio a Químicos procedentes de otras universidades como de la Universidad Montemorelos en Nuevo León y de otras universidades de nuestro país.

Posteriormente, como fruto del crecimiento y experiencia del Colegio, se establecieron otros objetivos como son la certificación de los profesionistas que demuestren su competencia ante el consejo de acreditación y certificación, el premio a la excelencia profesional, el vigilar el ejercicio profesional, colaborar con el gobierno como órgano consultor, promover, dentro de sus posibilidades, la expedición de leyes y reglamentos que involucren el ejercicio profesional.

Además de nuestras actividades académicas, nos ha sido grato fomentar la cultura y nuestros valores patrios. Así, dentro del calendario anual de actividades, siempre ha habido un espacio para conferencias culturales y/o celebraciones de las fiestas patrias. Se han procurado las relaciones con otros colegios similares del país. Se ha representado a los colegiados en los congresos y eventos científicos y oficiales relativos a nuestra área.

A través de su historia, el colegio ha contado con valiosas mesas directivas, ahora llamadas comité directivo, que se han distinguido por el amor al colegio y a la profesión y han dejado huella de trabajo, organización, compromiso y entrega. Todo lo anterior, se ha reflejado en cada evento organizado por el colegio, dando como resultado la imagen de una organización impecable, con ponentes y colaboradores de gran prestigio profesional, científico y académico.

El Colegio tuvo su sede en Washington 1315 al poniente de esta ciudad de Monterrey, donde se llevaron a cabo las juntas de comité directivo. Para el desarrollo de sus actividades académicas ha contado con el valioso apoyo de la Secretaría de Educación Continua de la Facultad de Medicina de la U.A.N.L., del Hospital de Altas Especialidades del IMSS, Laboratorios Dr. Moreira y Hospital Oca, entre otras instituciones que han apoyado al Colegio. Actualmente el CPQCNLAC tiene su sede propia en Isla #214 en la Colonia Nueva Morelos en Monterrey Nuevo León y lleva a cabo sus Sesiones Académicas Mensuales en el Auditorio 6 de Educación Contínua de la Facultad de Medicina de la UANL.

Aprovechamos este espacio para externar nuestro profundo agradecimiento por su colaboración altruista, que ha redundado en el bien para nuestros asociados y para la sociedad en general que demanda servicios profesionales de alta calidad científica, tecnológica y humana.

De la misma manera, desde sus inicios, el Colegio ha contado con el apoyo de casas comerciales de la localidad, quienes nos han apoyado económicamente patrocinando los gastos originados en el traslado y hospedaje de ponentes nacionales e internacionales de alto prestigio, quienes han colaborado en cursos y congresos organizados por el Colegio. También agradecemos en este espacio su invaluable colaboración.

Las bases sobre las que se ha cimentado el Colegio son muy promisorias en la visión de su futuro, en el que esperamos seguir alcanzando las metas propuestas y las que surjan a través de las necesidades de las nuevas generaciones de Químicos que se han incorporado a nuestro colegio.

De ellos esperamos que, con el entusiasmo de su juventud y preparación académica, impulsen cada día más su crecimiento y superación.

Fundadores

Según el acta fuera de protocolo número 10,416, de la Notaría Pública No. 60, levantada el 27 de junio de 1981, consta que en sesión de la Sociedad de Laboratoristas Clínico Biólogos del día 6 de junio de 1979, en el Auditorio del Hospital de Especialidades No. 21 del IMSS, siendo el Presidente de la Sociedad el Dr. Luis Juan Tijerina Sánchez y fungiendo como Secretario de la mesa directiva la QCB Dulce Aurora Zamudio se acordó disolver dicha sociedad y constituir el Colegio de Profesionales de la Química Clínica de Nuevo León y a su vez se acordó afiliarlo a la entonces Federación Mexicana de Químicos Clínicos.

El Dr. Tijerina supo contagiar su entusiasmo a otros compañeros, que junto con él hicieron realidad el sueño de agrupar en un órgano colegiado a los profesionistas de la Química Clínica. Entre ellos, podemos mencionar a la QCB Dulce Aurora Zamudio López, la QCB Gloria Cavazos Segovia y la QCB Angélica Huerta Velasco, quienes pertenecieron a la primera mesa directiva y comparten con el Dr. Tijerina la calidad de socios fundadores de nuestro colegio.

En el transcurso del tiempo, en el que nuestro Colegio ha trabajado arduamente, ellas han pertenecido a diversas mesas y consejos directivos y, al desempeñar esos puestos con mucho cariño y con espíritu de servicio, han dedicado altruistamente gran parte de su tiempo libre a las actividades del colegio por el bien de los profesionistas de la Química Clínica y de la comunidad regiomontana en general.
Breve Semblanza: Dr. Luis Juan Tijerina Sánchez. Fundador.

Luis TijerinaNuestro Colegio nació gracias a la iniciativa de su fundador Dr. Luis Juan Tijerina Sánchez†, quien concibió la idea de su creación en el año de 1979 y al que dedicó gran parte de su tiempo y cariño.

Egresado de la carrera de QCB de la Facultad de Medicina de la UANL, con un extenso curriculum académico y profesional, del que podemos mencionar la obtención del grado de Doctor en dos especialidades, fundador de la Carrera de Comunicación en el Centro de Estudios Universitarios (CEU) y maestro y Director de la Facultad que imparte la carrera en esta Universidad.

Se desempeñó como Consejero Propietario del CENEVAL y formó parte del Consejo Técnico para el examen General de Licenciatura en Ciencias de la Comunicación del CENEVAL, fue integrante del Consejo Nacional para la Enseñanza y la Investigación de las Ciencias de la Comunicación (CONEICC) y colaborador del Boletín Comunicabilis del CONEICC.

En el primer año de su sensible fallecimiento (†25 de mayo de 2007), el CEU le organizó un homenaje póstumo en el que se representó, en el Auditorio Polivalente Luis Juan Tijerina Sánchez, una obra de su autoría: “El Cuchillo de Obsidiana”, en la que plasmó personajes de la conquista de México.

Esta faceta de dramaturgo era desconocida para mí, aunque nos demostró sus habilidades de escritor, pues en una sesión cultural de nuestro colegio realizó la presentación de un libro escrito por él: “La Actividad Física y Recreativa en el México Prehispánico” (CEU: México, 1991), además de que cuando fuimos compañeros de trabajo, cada año en el mes de noviembre nos escribía calaveras al personal de laboratorio, donde nos describía a todos en forma por demás graciosa y atinada.

Luis Tijerina CEU Foto 1 autocorreccionEl Dr. Tijerina desempeñó actividades tan diversas, que se reflejan en el hecho honroso de que el Auditorio Polivalente del CEU, ubicado en el campus América, y un instituto de enseñanza preescolar en la ciudad de Apodaca, NL, llevan su nombre.

Algunos datos de esta breve semblanza los he conocido de antemano, pero para escribir este artículo, he quedado gratamente sorprendida, porque he descubierto muchos aspectos de la trayectoria profesional y humana del Dr. Tijerina, que antes no conocía. A propósito, otra de sus cualidades que descubrí en el transcurso del tiempo, fue su humildad, pues siempre que tuvimos oportunidad de conversar, no hizo gala de su grado de Doctor, ni de los importantes puestos que ocupó y sé que él estuvo agradecido con las muestras de cariño que recibió por parte de nuestro colegio, pues varios presidentes de Consejos Directivos lo invitaron a estar presente en momentos importantes para el colegio, como en la inauguración de sus primeras oficinas y en varias ocasiones en la celebración anual del día del Químico y pude ser testigo de que él los disfrutó mucho.

Muchos compañeros y amigos que asistimos a la Misa de Réquiem en sufragio del alma de nuestro fundador, en la que Monseñor Aureliano Tapia Méndez, egresado de la carrera de Licenciado en Ciencias de la Comunicación del CEU, hiciera una semblanza de su vida, empezamos a descubrir otras facetas del compañero y amigo Luis Juan Tijerina que, antes no tuvimos oportunidad de conocer, como el hecho de que fue Ministro Extraordinario de la Eucaristía, entre otras actividades dentro de su vida espiritual. Quizá una de las enseñanzas de su partida de este mundo, sea el que tengamos más cercanía con los seres que apreciamos.

Vaya esta breve semblanza del Dr. Tijerina como un pequeño homenaje a su trayectoria profesional y humana, como un reconocimiento a su labor altruista y espíritu de servicio y como un agradecimiento por su dedicación, amistad y cariño que nos brindó.La semilla sembrada por Luis Juan, ha sido fructífera y ha beneficiado a muchos profesionistas de la Química Clínica que hemos encontrado en el Colegio, entre otros beneficios no menos importantes, la actualización académica tan necesaria para nuestro desarrollo profesional.

Para conocer más sobre el colegio lo invitamos a visitar la página haciendo click aquí